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Un austriaco llamado Christian Schallert adquirió un departamento de apenas 24 metros cuadrados en Barcelona, lo único bueno que tenía el apartamento era una buena vista aérea, ya que se encontraba en uno pisos más altos del edificio en donde se encontraba. Al enterarse la madre de Christian, quedó impactada no sólo debido a que su hijo tenía que subir más de 100 escalones para llegar a su morada, también le molestaba lo extremadamente pequeño que era el departamento y para rematar, las condiciones del lugar eran realmente deprimentes: Un baño detrás de una fea pared verde, pladur colgando de las paredes y trozos incompletos de papel en la pared.
Pero el jovel Schallert no se rindió, él estaba convencido que la ubicación del departamento era excelente y había tomado la decisión de vivir ahí a pesar de las adversidades. Lo que el austriaco hizo fue darle un giro radical al aspecto y la distribución del departamento y lo convirtió en un lugar excelentemente distribuido al que no le hacía falta nada para ser totalmente habitable y funcional.
No cabe duda que Barcelona es una de las ciudades más hermosas de España y de toda Europa, como en todas las grandes ciudades la vida es muy cara y alquilar un piso es algo que tiene impacto en los bolsillos de todo aquel que quiera disfrutar de la maravillosa vida nocturna y las atracciones diurnas de esta ciudad catalana.
Los dejamos con el vídeo de la transformación que llevó a cabo Christian: Convirtió un pequeño departamento en un lugar de espacios infinitos.
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